Día uno: Se abre una ventana de chat. No tengo idea de qué mierda es, pero bueno de todas maneras escribo "Hola".
Día dos: Reviso los miembros, y busco caras conocidas. Encuentro a alguien familiar, reviso su foto, descubro que era el.
Día tres: La ventana de chat empieza a sonar consecutivamente. Cada vez hay más gente extraña, pero copada.
Día cuatro: Empieza a aparecer tu nombre en la ventana. Me daba vergüenza hablar, pero me gustaba leerte.
Día cinco: Hablé, me hablaste, indirectamente entablamos conversación, nada serio ni personal. Quizás solamente te dije "Hola" y vos dijiste "Hola".
Día seis: Dijiste "estoy mal" no dudé un segundo, te agregué, y esperé que aceptaras la solicitud. Abrí tu ventana, y te pregunté que te pasaba, (parte de impulsos que nadie entiende). Me contaste tu historia, me sorprendí, después intenté ayudarte, después empecé a caer.
Día siete: Todavía no logro que me digas te quiero, aunque hablamos mucho, te mantenías firme en tu postura.
Día ocho: Ese día escribiste "Te qui..." Jamás fuí tan feliz.
Día nueve: Escribiste "Te quiero". No pude esconder mi sonrisa, te fuiste a francés y me dijiste "Si querés podés escribirme mensajes". Agarré el celular, y te escribí que creía que te extrañaba.
Día diez: Te escogí un seudónimo "CUTE BOY"
Día once: Ya era un hecho. Me gustabas, mucho.
Día doce: No podía esperar para volver a Mar del Plata.
Día trece: Esa mañana partí para Mar del Plata, con la idea de llegar, bajarme del colectivo y verte.
- Ese día te ví por tercera vez, te dí un beso en la mejilla, me dijiste "Bonjour", te miré a los ojos y...
- Fuimos al Condor, tomamos algo muy feo, (no pude evitar pedir lo mismo que vos), me mandabas mensajes. (Memorandum: "Yo no quiero un nerd, quiero un Diego Dos Santos, yo, mi sonrisa, te odié).
- Se acercaba la noche, caminamos un poco, me acompañaste unas cuadras, te saludé, ahora para decir "chau", pero intenté darte el beso más tierno y poco obvio posible. (Todavía no puedo olvidarme).
Día catorce:
Día quince:
Día dieciséis:Te veía todas las tardes, prácticamente. Hablabamos de la vida, me hacías sonreir...
Día diecisiete:
Día dieciocho:
Día diecinueve: Fuí a tu casa, te pude abarazar por primera vez. Te dí el primer beso, te miré, sonreí, te abracé otra vez. Miramos películas, me pediste de ser tu novio, volví a sonreír y hasta hoy sonrío.